miércoles, 1 de agosto de 2012

Yo dije un día “Nunca me abandones”


Yo dije un día “Nunca me abandones”

La primera vez que vi esta película no tenía la más mínima idea de su contenido y quedé impactada con su profunda temática. Ahora la vuelvo a ver en Moviecity y me encuentro con que es una adaptación de una novela que fue best seller en el 2005 y por el conocimiento que tengo de adaptaciones literarias al cine creería que esta novela debe ser maravillosa.

Una película estrenada en el 2010 que cuenta la historia de Kathy, Tommy y Ruth, un grupo de amigos que crecieron juntos en un internado en Inglaterra; aprenderán la importancia de la amistad, del arte y del amor, mientras se preparan para aceptar y afrontar la realidad que se les tiene preparada.


Todos hemos amado profundamente a nuestros amigos, todos hemos tenido amores ocultos, todos hemos sentido querer dar la vida por alguien pero ¿venimos a dar la vida por alguien?
¿Acaso está bien utilizar a otro ser humano para salvar a otro?

Admiro infinitamente a carey Mulligan, además de ser una mujer hermosa es cautivante en todos sus papeles y esta no es la excepción, oportunidad en la que además se complementa con sus dos personajes cómplices  con los que forma un lazo de vida, de educación, de personalidad, 3 personajes que se complementan, desde su niñez y su inocencia  forman temores, amores y sueños dolorosos hasta llegar a la razón propia de la adultez donde se enfrentan a una dura realidad.

El guión es maravilloso, retrata el alma del ser humano, recuerda la banalidad de la vida y cuestiona el sentido que se le da, está lleno de detalles bien cuidados y minuciosos que hacen al espectador debatir si verdaderamente es esta la sociedad que anhelamos.

Destaco su fotografía, la música, el vestuario y los diálogos. La película está adelantada a su tiempo aunque la historia este situada más o menos de 1978 a 1994 me siento en total capacidad de traerla al presente.  Ya no estamos en nuestra infancia, ya no vivimos en una burbuja protegidos, de hecho los niños de ahora no viven protegidos, no hay reglas absurdas como las de internado ni se educa gente para salvar la vida de alguien más en un futuro. Aun así actualmente el ser humano descuida su propia  vida, ahora valen más miles de superficialidades que la verdadera felicidad, hasta tal punto de engañarse uno mismo, no respetar su vida ni sus sentimientos. Ni en la película ni en la actualidad se respeta la vida propia.

No sé qué pasaría si realmente algo determinara quién es más que otro o qué sentimiento es más que otro y si se determinara creo que no quisiera saber en qué grupo estoy yo o están mis sentimientos.

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